Aquella noche, la lluvia se convirtió en aguanieve y, mientras miraba las cimas de las montañas, recordé cuando en Nochebuena anhelaba ver saltar a Papá Noel por encima con su trineo. Sabía que no volvería a creer en Papá Noel nunca más, ni en las brujas, pero tenia algo mejor en lo que creer.
Nunca más volvería a saltar la comba o a jugar a ser otra persona o a recortar muñecas de papel. Nunca volvería a recorrer aquellas montañas, ni a deambular entre las hojas doradas, ni a cantar a los árboles desde el borde del barranco, ni a esparcir una torre de hojas que tocara las nubes, ni a columpiarme en una enredadera. Nunca más volaría en las mágicas alas de la niñez… al menos, no es esta vida.
Ayer sonó I will be y me puse a llorar. Qué es ese efecto curioso que tenés en mi?
Mi reino por tu persona.
Frances.
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